domingo, 10 de octubre de 2010

Sur moi, l'amour et l'amitié

Éste es el primer 'post' que haré en este blog y seguramente a nadie le importe más que a mí... y está bien. Todavía no sé cuál será la línea que seguirá esta página, por el momento contendrá desde una especie de 'diario', la manera de lograr escribir algo más que las tareas escolares, las tesis que pronto comenzaré, ideas y pensamientos que traigo adentro, así como cualquier otra cosa, cuestión, tema o tópico que se me ocurra. ¡Total, este blog es mío y para mí! 

Tras esta pequeña justificación que nadie pidió pero que quería expresar, comienza pues el primer intento de lograr que mis diarias horas en internet sean más productivas de lo que son (jajaja).

Y sí, comenzaré con lo que ha acontecido últimamente en mi vida. Tras comenzar éste mi noveno semestre de ocho en la carrera (sic), de estar a punto de terminar el requisito del francés y darme cuenta de lo complejo que es; adentrarme en los caminos de la tesis y comenzar a temerle en serio; experimentar una especie de distanciamiento de algunas amistades y personas queridas para mí; sentir cómo he dejado escapar tiempo valioso y quizá otras muchas cosas que no recuerdo o no quiero escribir aquí, me encuentro en uno de esos momentos en los que se supone que una persona debe decidir qué hacer consigo misma o algo así, aunque la mera verdad, sigo sin saber que será de mí, bastante tengo ya con el ahora y el aquí como para saber qué diablos ocurrirá después.

En uno de esos constantes momentos en los que parece que sólo observo un punto muerto en medio de la nada, con la mirada perdidad y los audífonos en los oídos, escuchando alguna larga melodía que me gusta mientras me consumo un poco más entre el humo del cigarro, llega de pronto una marea de pensamiento que me golpea, me envuelve y no me abandona, al menos hasta que algún acontecimiento, persona o algo, me recuerde que estoy en la escuela, en la explanada del A-8 y que debo, de alguna manera, dejar de pensar tanto y actuar.

Una de las cosas que desde la adolescencia se ha convertido en una obsesión y/o trauma, fijación o necesidad, es la cuestión del 'amor' o eso que suele llamarse así. Supongo que por influencia del ambiente en el que me he desarrollado, la idea que me he creado de dicha cosa ha sido, quizá, demasiado romántica, idealizada, engañosa o superficial y en últimos tiempos, demasiado 'racional' (tal vez ahí radique una de las razones de tantos y tantas malentendidos frustraciones).

Además de lo penoso que siempre he sido, de los complejos que no he enfrentado y de no sé qué más razones, yo siempre he considerado que 'eso del amor y las relaciones afectivas/emocionales no es lo mío' (me cito de memoria y no me importa lo patético que pueda sonar dicha idea, más bien leerse, puesto que al menos ya he dudado de ella y he comenzado a cuestionarla y modificarla). Lo más seguro es que sólo haya sido mi mala disposicipon, mi ignorancia (tanto de mí como de los otros), como el simple transcurrir de las circunstancias, lo que me haya hecho pensar que 'tenía mala suerte'. ¡Patrañas, excusas, justificaciones! Es mucho más sencillo siempre culpar a algún factor externo, persona o circunstancia de lo que nos ocurre, pero no, no más, ¡no más!

He aprendido, o quizá comenzado a hacerlo, a conocerme a mí mismo, mi actuar, mis conductas recurrentes, mis idealizaciones, mis prejuicios, mis errores... He causado daño, lo sé, con intención o sin darme cuenta. Quizá el desconocimiento de nosotros sea una de las mayores causas de dolor y sufrimiento. Me vienen a la mente las palabras de un inventor quien decía que los errores no existían, más bien él había encontrado numerosas maneras de no lograr su objetivo, aunque había logrado otros (entre éstos quemarse las manos y descomponer muchísimos aparatos, jajaja). Seguramente en la vida real, dichas maneras de no lograr nuestros objetivos no nos generan tantas carcajadas como la imagen del inventor quemándose; todo lo contrario. Pero que sería de la vida sin todas y cada una de las aristas que la conforman, cada una necesaria para poder experimentarla, disfrutarla o sufrirla y poder compararla con su (cuasi) opuesta o contraria. Pues como dice la canción de Skalariak: "...sin la tristeza en esta vida las alegrías no tendrían valor...".

También deseo hablar un poco de la amistad, pues últimamente me han ocurrido experiencias insospechadas. Entre éstas, las que me han causado un poco desasosiego son aquellas en las que amigos que yo consideraba especiales, de ésos que cuentas con los dedos de la mano, se han alejado un poco: ya no nos hablamos ni vemos como antes, ni nos contamos o hacemos lo que tanto nos gustaba. Y esto no ha sido unilateral sino de ambos lados. Acepto que he descuidado un poco estas relaciones y la sensación de no contar o estar con estos seres querido ha sido un poco desconcertante. Aunque asimismo me ha servido para valorar a mis amigos y comprobar la solidez de los lazos que nos unen.

Por otra parte, en la FES he encontrado el cariño de 3 grandes personas que sin pensarlo, se convirtieron en pilares. Ellas me han escuchado, aconsejado, aguantado, comprendido y sobre todo ayudado. Y miren que soy una persona 'complicada' y un poco molesta, lo sé y admito. Me burlo en situaciones que no son las más apropiadas (y en general me río de mí y de casi todo), molesto y critico a medio mundo, rara vez me parece algo y demás detalles mios que quizá los que me conozcan se sepan de memoria. Pero independientemente de eso, y hasta me ha sorprendido, ha habido y hay muchas personas -hasta una maestra- que me han brindado su apoyo y alegría: con éstos platico, río, convivo, aprendo y paso muy agradables momentos. A todos ellos un gran y sincero agradecimiento. ¡Y qué decir de mis amigos de FFyL y el de la ENAH! He conocido allí a personas de ésas que son difíciles de hallar, que me han aguantado, comprendido, querido, estimado, escuchado y demás. ¡No sé qué haría sin todos estos seres que forman parte de mí! Je suis très remercié avec vous! 

Y prosigo con otra gran disgregación acerca de mí ahora, domingo 10 de octubre a las 3:56 am, momento y hora en que escribo esto. Para mí, si no estás bien contigo mismo, es muy difícil que logres estar bien con los demás y el mundo. Sé que todavía no logro ese estado de 'plenitud' que he buscado desde hace años, pero poco a poco, creo irme acercando a él. A veces se retrocede un poco (o mucho, depende), otras se avanza a pasos agigantados o pequeños; el chiste es que uno no permanece estático. Heráclito tenía razón: todo fluye, fluimos, nos transformamos. Por eso ante una de las preguntas más socorridas (¿qué haces?) respondo certeramente: devengo. Poco a poco vamos construyéndonos, depende de nosotros, los demás y nuestro entorno.

Bueno, creo que. como me ocurre frecuentemente, hablo de todo y de nada, mis constantes disgresiones y la maraña que conforma mis pensamientos debe ser organizada y moldeada, debe surgir un orden y éste es uno de los motivos de haber creado un blog. Así que cualquier persona (si es que llega a haber alguna que lea esto y le interese o llame la atención) que guste opinar, hágalo. Jajajaja. Muero ya de sueño y estas frecuentes desveladas, pese a todo lo bueno que conllevan, hacen estragos...

Y por si lo han notado, sí, soy un traumado del francés; incluré referencias a grupos musicales, autores y obras que no conozcan, no les gusten o les den igual. NO ME IMPORTA. Ya, de nuevo creo que divago sin un fin determinado, y tienen razón quienes han revisado mi proyecto de tesis: ¡deja de justificarte! Y sí, lo haré, llevo trabajando en eso desde que me lo mencionaron, así que no esperen más de esta mala verborrea autojustificativa. Sé lo que escribo y por qué lo hago; sólo espero que las futuras entradas sean un poco más interesantes, tanto para mí como para los (ahora y seguro después será igual) inexistentes lectores.

À bientôt!

3 comentarios:

  1. El amor, las relaciones, el desasosiego que producen los cambios, el inicio de nuevas aventuras... el quemar las naves, el cambiar de tren, el tener que hacer escalas, todo eso es parte de la vida. Sí, todo parece ser una sucesión de contrarios, a veces parece que todo se repite, aunque en realidad se trata del mismo animal que al hallar un piedra no hace otra cosa más que tropezar. Un abrazo y aunque no sé si podré seguir y comentar, intentaré darme una vuelta de vez en cuando para conocerlo mejor. ¡Suerte! Alejandra

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  2. Bienvenido al mundo del blogspot.
    Ya tienes algo más con que distraerte pero sobretodo hacer de tu tiempo algo productivo (adicto), he leído todo pero omitiré mis comentarios por una razón, lo siento soy alguien muy exagerada.

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  3. Gracias por compartir. No sabía que me gusta cómo escribes. Por fa, no dejes de hacerlo.
    Un beso.

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